Opinión
sobre el documental “Henri Cartier-Bresson: The Impassioned Eye”
Personalmente no soy alguien que hasta el
día de hoy haya tenido gran interés en la foto, desconozco mucho de esta disciplina,
por lo tanto desde el punto de vista de la fotografía no puedo aportar mucho.
Sin embargo desde el punto de vista del dibujo es donde siento cierta conexión,
no en cuanto a los dibujos de Bresson, si no la cuestión del ver, del observar,
esa es la base del dibujo, pero en este documental llamo mi atención que se
mencione el saber ver como una parte fundamental de la fotografía, no es solo
apretar un botón y ya, eso solo es el punto final en un acto de observación.
Me gusto las menciones que hacen de la foto de
Bresson como algo instintivo, que le nace y ya, también lo que el mismo
menciona que “su pasión nunca ha sido por la fotografía si no por la
posibilidad de olvidarse de uno mismo, de capturar en una fracción de segundo
la emoción del sujeto y la belleza de la forma, hay una geometría natural en lo
que vemos, no tengo un mensaje, no trato de probar nada, ves, sientes y el
sorprendido ojo responde… el ojo hace el encuadre y la cámara el trabajo”.
Sobre todo esta ultima es la que mas a resonado en mi. Siento que con esta
frase marca una clara línea sobre su trabajo en el que lo humano es primero, la
cámara solo es una extensión de el ojo que completa el acto del ver.
En el documental ahí una parte donde un
entrevistado menciona que ojo, mente y corazón deben de estar alineados,
balanceados en cuanto a una buena foto, Bresson continua que la base de la foto
es la estructura y la geometría. Esta fue una parte que me hizo reflexionar un
poco, y me vino la idea de que el ojo y la mente son la estructura y la
geometría lo cual debe de ir en primer lugar, el corazón es el sentir de uno
con su entorno y es lo segundo, pero siempre todo junto para lograr una buena
foto, porque sin lo primero seria algo quizás con mucha intención pero feamente
ejecutado lo cual restaría el peso emocional que pudiera tener la imagen, y por
el contrario una foto que sea solo estructura y geometría estaría técnicamente
bien ejecutada pero al no haber emoción, el producto resultante seria muy
mecánico y aburrido.
Finalmente me sorprende la capacidad que tuvo
este hombre de estar siempre en la acción en el momento, de viajar
constantemente como si persiguiera las imágenes, pareciera que vivía con la
cámara pegada a las manos. Para mi este documental me deje la idea de que
Bresson es un ejemplo de que el talento puede ser natural pero la maestría en
cualquiera que sea la actividad que uno desarrolle se logra a través de la
practica constante e incesante, de errar y corregir no una ni dos veces, sino
miles.
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